El consumo energético es uno de los dispendios más importantes que debe afrontar cualquier hogar y cuando hablamos concretamente de la energía eléctrica traducida en la factura de la luz que nos llega cada mes entonces la importancia es máxima, por ello saber cómo reducir la factura de la luz resulta sumamente interesante y tremendamente importante.
Vivimos en un mundo permanentemente conectado y vivimos en un mundo donde vivir sin fluido eléctrico se ha convertido casi en una quimera. Un hogar que se quede sin luz es un hogar que malvivirá y que tendrá extremas dificultades para afrontar el día a día con la más mínima ya no normalidad, sino ni tan siquiera con la más mínima operatividad.
Esta necesidad imperiosa de disponer siempre de fluido eléctrico hace que tener luz en el hogar sea ya algo casi tan esencial y básico como el comer y el respirar, sin luz todo sería mucho más difícil, sin disponer de fluido eléctrico todo se complicaría en sobremanera.
La importancia de reducir la factura de la luz
Independientemente de los casos de pobreza energética y otras cuestiones sociales que no competen a este artículo analizar una realidad innegable es que para muchas familias pagar la luz a final de mes se ha convertido en un verdadero problema y quebradero de cabeza o cuanto mínimo se ha convertido en una rutina nada agradable.
Y se ha convertido en una rutina nada agradable pues el precio de la energía eléctrica, el precio que nos cobran por la luz que llega a nuestros hogares no ha dejado de subir y subir en los últimos años, por todo ello resulta imprescindible saber cómo reducir la factura de electricidad.
Saber cómo reducir la factura de la electricidad resulta muy importante para el bolsillo familiar, pero sin ningún tipo de lugar a dudas también tiene otro tipo de implicaciones como por ejemplo las medioambientales y es que aun mejor aprovechamiento de la energía y un menor despilfarro de esta un menor impacto global para el medio ambiente por distintos motivos, pero en este asunto concreto tampoco compete a este artículo entrar en profundidad.
Una primera respuesta rápida nos podría llevar a decir que la mejor forma de reducir la factura eléctrica es consumiendo menos electricidad, dicho así puede sonar muy bonito y parecer muy bien pero cuando se entra a analizar un poco la cuestión de fondo vemos que en realidad es una respuesta muy simplista y una verdad a medias, como mínimo en el contexto en el cual que siempre se expresa esa necesidad de reducir el consumo, pues siempre se hace el equivalente de consumir menos electricidad con el utilizar menos electricidad y ello no siempre es posible.
Obvia y evidentemente que toda persona debe de mantener unos hábitos adecuados reducir la factura de la electricidad, pero decir que para saber cómo reducir la factura de la luz simplemente debemos utilizarla menos es tan sólo una quimera o una verdad a medias tal y como se indicaba.
Y es una quimera y una verdad a medias pues ni mucho menos siempre nos resultará posible reducir el consumo eléctrico si queremos mantener una vida con un grado de confort aceptable, debemos encender las luces para vernos, debemos ducharnos, debemos cocinar y debemos realizar tantas cosas que requieren de electricidad que decir que lo que debemos hacer para lograr pagar menos luz es renunciar a eso es como decir que debemos volver a la edad de piedra.
Ahora bien, una cosa es decir que no se puede renunciar al consumo energético, en este caso concretamente al eléctrico y otra cosa es decir que no se puede hacer un consumo responsable y optimizado, y de eso se trata de ser responsables y optimizados. Igual no se puede renunciar a utilizar la luz, pero sí que se puede vigilar no dejarse las luces encendidas innecesariamente, no dejar los aparatos en estado de reposo cuando pueden estar apagados y otras tantas medidas que nos deben permitir pagar menos luz.
Optimizando la factura eléctrica
Un buen primer paso en el camino para saber cómo reducir la factura de la luz es por ejemplo disponer de un contador instantáneo. Este tipo de contadores se puede adquirir muy fácilmente a través de Internet y nos permite tener una visión más aproximada del consumo real de electricidad que realizamos.
Cabe decir que los contadores instantáneos para uso doméstico no ofrecen unas mediciones absolutamente precisas del consumo eléctrico, pero sin lugar a duda suponen un buen acicate para ver la electricidad que estamos consumiendo y es que los mismos nos permiten poner datos reales a algo que de no verlo de una forma medida consideramos etéreo y no lo sabemos cuantificar. Este tipo de aparatos son muy baratos, ahora bien, si se busca precisión máxima entonces el precio ya es mucho más elevado pero, como mínimo, para el ámbito doméstico no vale la pena gastarse mucho dinero con los modelos básicos es más que suficiente.
Una de las cosas que nos permiten visualizar los contadores instantáneos es el consumo subterráneo o el consumo oscuro de nuestro hogar. El consumo subterráneo o el consumo oscuro de nuestro hogar no es nada más que aquel consumo que no somos conscientes que se está produciendo.
Muchas personas tienen a pensar que si se tienen todas las luces apagadas y no estamos utilizando activamente ningún electrodoméstico o aparato el consumo será cercano a cero, ello es lógico de pensar y puede entenderse como la realidad que se produce por ejemplo cuando estamos durmiendo o cuando estamos fuera del hogar, pero la realidad es bien distinta y los contadores instantáneos nos muestran esa realidad y ese es un primer paso para saber cómo reducir la factura de electricidad en casa de una forma efectiva.
En realidad aunque nosotros no estemos utilizando activamente los electrodomésticos o no tengamos la luz encendida a no ser que lo tengamos todo absolutamente desconectado o mejor aún a no ser que tengamos el interruptor de la luz general de toda la vivienda desconectado siempre existirá un consumo eléctrico subyacente en segundo plano que persistirá y ello es así ya que la nevera no la estaremos utilizando pero estará encendida, habrá un sistema igual de alarma que está conectado a la red eléctrica o no estamos utilizando la consola de juegos o la televisión pero no las hemos apagado y las tenemos en reposo.
Lógicamente, no se podrá siempre desactivar todo el consumo subyacente pues evidentemente a no ser que nos vayamos por un largo periodo de tiempo y dejemos la nevera vacía no podremos desconectarla o no deberemos desconectar nunca la electricidad completamente si disponemos de un sistema de alarma o de otros sensores y sistemas de protección que requieren de la electricidad para poder operar, pero sin duda el disponer de un medidor que indique aquello que sí que se podría minimizar hará que podamos tomar consciencia.
Muchas personas quizás podrán pensar que el consumo anterior del cual se está hablando es residual, que no tiene gran importancia, que no es elevado y resulta cierto, en el corto plazo puede que no estamos hablando de un coste elevado pero ese coste sostenido en el tiempo supone un ahorro de unos cuantos euros que siempre vienen bien.
Ahora bien, dicho lo anterior también resulta evidente que si realmente queremos reducir de una forma sustancial el consumo de electricidad y que realmente se note en la factura de final de mes no debemos tan sólo en medir tal y como se ha mencionado en los párrafos anteriores y en optimizar esos costes subyacentes o residuales, se debe ir mucho más allá.
Y es que para ir mucho más allá y proceder a saber cómo reducir la factura de electricidad de una forma real, sostenida y sostenible en el tiempo se deben hacer dos grandes cosas: utilizar sistemas eficientes energéticamente y mantener los aparatos que consumen energía eléctrica en buenas condiciones.
Empecemos por el final, muchas personas pueden poner atención a comprar la mejor de las neveras, el más esplendido lavavajillas o la televisión más impresionante, pero si luego estos aparatos no se mantienen o configuran adecuadamente la optimización no será máxima. Así, por ejemplo, en el caso de las neveras resulta sumamente importante evitar que se acumule hielo en las mismas pues ello ocasiona un gasto energético mucho mayor, en el caso de los lavavajillas (o lavadoras) resulta importante utilizar los programas adecuados al tipo de lavado que estemos realizando y en el caso de los televisores mantener unos ajustes de brillo de pantalla economizadores de energía también es otra de las buenas medidas a tomar.
Y, por supuesto, para saber cómo reducir la factura de la luz deben utilizarse sistemas eficientes y debe tenerse un hogar eficiente energéticamente, ello pasa por utilizar bombillas de bajo consumo, por comprar electrodomésticos de alta eficiencia energética pero también pasa por tener una casa bien aislada y en general con un alto grado de eficiencia energética en su conjunto, todo ello nos podrá hacer ahorrar unos importantes euros cada final de mes.